martes, 6 de diciembre de 2011

Leyendas de Inlaterra

En busca del rey Arturo
Arturo nace en un encuentro entre Igrayane, esposa de Gorlois, y el rey Uther Pendragón (convertido en Gorlois por el mago Merlín).
El niño fue entregado a sir Ector para que lo criara como si fuera su hijo.
Cuando el rey Uther murió y Arturo cumplió 16 años, Merlín le reveló su verdadera paternidad después de que el joven lograra sacar una espada clavada en un yunque que nadie podría sacar de no ser “el verdadero rey de toda Inglaterra”
Bajo el reinado de Arturo, Inglaterra gozó de 12 años de paz, en los que floreció la caballería.
Arturo reunió en su castillo de Camelot a los más valientes caballeros de su reino: Lancelot, Gawain, Percival... y los sentó alrededor de una gran mesa redonda con sus nombres gravados en oro en sus respectivas sillas.
Merlín enseño a combatir el crimen, la crueldad, ser misericordiosos, no mentir, respetar y proteger a las mujeres...
Los caballeros viajaban desde Camelot para luchar contra dragones, duendes, gigantes y sus encuentros contra las fuerzas del mal generalmente ocurrían en castillos embrujados, bosques sombríos y jardines mágicos, y más tarde volvían a la corte para contar sus hazañas.
Arturo trajo a Camelot a ginebra para ser su reina, pero Lancelot se enamoro de ella y, al ser descubiertos por Mordred, Arturo salió tras ellos y encargo su reino a Mordred, este se apodero del reino y, al volver, Arturo se enfrentó a Mordred a muerte. Mordred, antes de morir, hirió al rey. Los fieles súbditos de Arturo pusieron al moribundo en una barca que navegó rumbo a Avalón, mítica isla de los santos y tierra de las manzanas que simbolizan la eterna juventud que aguarda a los héroes vencedores. Se dice que Arturo fue curado en Avalón y muchos seguidores profetizaron su regreso.
Inglaterra en la época de Arturo
Se supone entre el fin del siglo V y principios del siglo VI, se da como fecha de su última batalla con Mordred los años 537 y 542.
Un siglo antes, los romanos se retiraban gradualmente de la colonia inglesa al no poder resistir la invasión de las tribus bárbaras. A continuación, llegaron varios guerreros a pelear contra invasores bárbaras y también entre si. No se sabe de ningún reino unificado ni de gobernante que tuviera algo mas que poder local. El cristianismo no se introdujo en Inglaterra hasta que en el 597 llegó san Agustín con sus 40 monjes. Esto fue lo que marcó el inicio de la edad media para Inglaterra. Si se da crédito al monje galés Nennius, un guerrero llamado Arturo dirigió la resistencia contra los invasores.
Arturo nace en un encuentro entre Igrayane, esposa de Gorlois, y el rey Uther Pendragón (convertido en Gorlois por el mago Merlín).
El niño fue entregado a sir Ector para que lo criara como si fuera su hijo.
Cuando el rey Uther murió y Arturo cumplió 16 años, Merlín le reveló su verdadera paternidad después de que el joven lograra sacar una espada clavada en un yunque que nadie podría sacar de no ser “el verdadero rey de toda Inglaterra”
Bajo el reinado de Arturo, Inglaterra gozó de 12 años de paz, en los que floreció la caballería.
Arturo reunió en su castillo de Camelot a los más valientes caballeros de su reino: Lancelot, Gawain, Percival... y los sentó alrededor de una gran mesa redonda con sus nombres gravados en oro en sus respectivas sillas.
Merlín enseño a combatir el crimen, la crueldad, ser misericordiosos, no mentir, respetar y proteger a las mujeres...
Los caballeros viajaban desde Camelot para luchar contra dragones, duendes, gigantes y sus encuentros contra las fuerzas del mal generalmente ocurrían en castillos embrujados, bosques sombríos y jardines mágicos, y más tarde volvían a la corte para contar sus hazañas.
Arturo trajo a Camelot a ginebra para ser su reina, pero Lancelot se enamoro de ella y, al ser descubiertos por Mordred, Arturo salió tras ellos y encargo su reino a Mordred, este se apodero del reino y, al volver, Arturo se enfrentó a Mordred a muerte. Mordred, antes de morir, hirió al rey. Los fieles súbditos de Arturo pusieron al moribundo en una barca que navegó rumbo a Avalón, mítica isla de los santos y tierra de las manzanas que simbolizan la eterna juventud que aguarda a los héroes vencedores. Se dice que Arturo fue curado en Avalón y muchos seguidores profetizaron su regreso.
Inglaterra en la época de Arturo
Se supone entre el fin del siglo V y principios del siglo VI, se da como fecha de su última batalla con Mordred los años 537 y 542.
Un siglo antes, los romanos se retiraban gradualmente de la colonia inglesa al no poder resistir la invasión de las tribus bárbaras. A continuación, llegaron varios guerreros a pelear contra invasores bárbaras y también entre si. No se sabe de ningún reino unificado ni de gobernante que tuviera algo mas que poder local. El cristianismo no se introdujo en Inglaterra hasta que en el 597 llegó san Agustín con sus 40 monjes. Esto fue lo que marcó el inicio de la edad media para Inglaterra. Si se da crédito al monje galés Nennius, un guerrero llamado Arturo dirigió la resistencia contra los invasores.
Los romances artúricos franceses más antiguos son una serie de poemas llenos de ideales caballerescos y amor cortesano del trovador del siglo XII Chrétien de Troyes de los que podemos destacar: “Perceval o la historia del Grial”, -la primera versión literaria de la leyenda del Santo
Los romances artúricos ingleses de los siglos XIII y XIV se refieren a los caballeros, sobre todo a Gawain. La obra maestra de todos ellos fue “Sir Gawain y el caballero verde” (1370) de autor anónimo.
Varios de estos cuentos artúricos fueron reescritos por Sir Thomas Malory en la primera gran epopeya en prosa de la literatura inglesa “La muerte de Arturo”; esta obra que fue publicada en 1485 por el primer impresor ingles, William Caxton, abarca 21 volúmenes; está escrita en prosa poética y destaca por su riqueza, dignidad, sencillez y melodía.
Muchos escritores han adaptado las historias de Arturo, sus caballeros y la corte de Camelot a los gustos y temas contemporáneos.
El poeta Edmund Spenser idealizó a Arturo como el perfecto caballero en su alegória épica de la sociedad isabelina “La reina de las hadas” (1590-1599) y Alfred Tennyson tambien se basó en estas historias para su “Idilios de rey” (1859-1885)
La música también se ha interesado por las leyendas artúricas, por ejemplo “Parsifal” de Richard Wagner (1882)
El mago Merlín
Merlín es posiblemente el personaje más extrtaño de la leyenda del rey Arturo.
Hijo de una mujer piadosa y un íncubo, espíritu maligno etéreo del que se decía que atacaba a los inocentes por la noche.
Al nacer, Merlín, fue llevado a la pila bautismal, por lo que no heredó la naturaleza maligna de su padre, pero si tuvo ciertos poderes sobrenaturales. Conocía el pasado y predecía el futuro, y podía transformarse a voluntad en la forma que deseara: duende, perro, venado, mujer...
Antes de escribir su “Historia de los reyes de Inglaterra” Godofredo de Monmouth escribió un breve tratado en latín llamado “El pequeño libro de Merlín” que hizo pública la figura del mago.

 

video de la leyenda Jinete sin cabeza

Leyendas míticas

Reina de Francia

Felipe II Augusto de Francia había perdido a su primera esposa, la hermosa Isabel de Hainaut, en un difícil parto gemelar en el que también morirían los dos niños alumbrados. La joven reina no tenía aún los veinte años y ya había dado un heredero al trono de Francia: el futuro Luis VIII, nacido tres años antes. Felipe era consciente de que tenía que volver a casarse los más rápidamente posible. La sucesión dinástica no estaba realmente asegurada con un único hijo de corta edad que ya había sufrido una grave enfermedad. Pidió y obtuvo la mano de la rubia Ingeborg de Dinamarca, llamada también Isambur, hermana del rey Knut VI. Se firmó el acuerdo matrimonial, al que la princesa danesa aportó una dote de 10.000 marcos de plata, y la novia se dirigió a Francia.


Felipe e Ingeborg se casaron con gran pompa en París el 15 de agosto de 1193. Lo que sucedió en su noche de bodas es un enigma y ha dado lugar a toda clase de especulaciones posibles tanto por parte de sus contemporáneos como por los historiadores. El caso es que a partir del día siguiente, al ver aparecer a su joven esposa, al rey le entraron unos sudores fríos y un temblor nervioso tales que, desde ese instante, declaró su intención de repudiarla.

Algunos piensan que él descubrió que no era virgen, otros que estaba enojado porque los daneses no habían proporcionado la ayuda militar prometida contra su enemigo el rey Ricardo de Inglaterra, una teoría moderna atribuye su comportamiento a una fiebre que contrajo en la Cruzada que le hizo impotente y se sugiere también una oculta deformidad física en Ingeborg, aunque las descripciones contemporáneas dan fe de buena apariencia y carácter.


Fueran cuales fuesen las particularidades físicas de la princesa danesa, el rey iba a comportarse de una manera inexcusable; no sólo se negó en lo sucesivo a tratar a Ingeborg como a su mujer sino que la encarceló. Luego buscó un pretexto para obtener el divorcio, descubrió que Ingeborg era pariente de su primera esposa, y unos prelados complacientes declararon nulo el matrimonio por motivos de consanguinidad. Pero la reina Ingeborg apeló al Papa Celestino III, quien defendió su causa pero poco hizo por ella.

Felipe se unió en matrimonio con la joven bávara Inés de Méranie, hija de un príncipe del imperio, en junio de 1196. De este matrimonio nacerían dos hijos. El nuevo Papa Inocencio III, elegido dos años después, censuró el nuevo matrimonio del rey y le ordenó regresar con Ingeborg, otorgándole su lugar como reina. Y como Felipe se mostraba reacio a abandonar a Inés, se lanzó un interdicto sobre todo el reino: se prohibía la celebración de la liturgia y la población se veía privada de los sacramentos, sin poder dar cristiana sepultura a sus muertos, ni celebrar bodas ni bautizos, las campanas de las iglesias dejaron de tocar. El Papa levantó la sanción cuando el rey consintió finalmente en separarse de Inés, que se retiró al castillo de Poissy donde murió en julio de 1201.


En 1213, Felipe había restituido a la reina Ingeborg el lugar que le correspondía en la corte de Francia. Había agotado para repudiarla todas las argucias del derecho civil y del canónico, todas las maniobras de intimidación, las amenazas, apelaciones y dilaciones. El matrimonio había sido disuelto varias veces por unos prelados complacientes y otras tantas restablecido por los legados pontificios. La reina había sido alternativamente encerrada en la abadía de Cisoing, cerca de Tournai, luego en una torre de Etampes, obligada a vivir una existencia austera y solitaria. Ingeborg perseveró durante veinte años, reclamando su derecho con tal obstinación que, por más que fuese el rey, Felipe tuvo que ceder. La reina contó con el apoyo de su hermano el rey de Dinamarca y el de los Papas, incluso si su ayuda era a veces cautelosa.

Parece, por otra parte, que durante sus últimos años el rey Felipe le había sido relativamente fiel; al mencionarla en su testamento la llama su carissima uxor, su esposa queridísima. Se dice que en su lecho de muerte, le pidió a su hijo y heredero Luis VIII que la tratase bien. Y según el testimonio unánime de sus contemporáneos, la trataba “no como a una madrastra, sino como a una madre”. Durante los últimos años de su vida se la llamaba la reina de Orleáns, pues tras su viudedad, Orleáns o Corbeil se habían convertido en sus residencias favoritas. Asistió a eventos reales y sobrevivió a su esposo más de catorce años. Fue enterrada en la iglesia de la Orden de San Juan en Corbeil.



Títulos de leyendas

La Llorona.

El Callejon del Beso.

El Silbon.

9 veces Verónica.

Mi paraíso no está ya en este mundo.

Archivo 005  El Extraño.

¿Así que buscas el video más aterrador del mundo?.

Las gemelas.

clasificacion de las leyendas

 

Clasificación

La clasificación del amplio material que se posee es difícil. La Comisión de especialistas designada en el Congreso que se reunió en Budapest en l963, convocado por la International Society for Folk Narrative Research propuso una clasificación internacional que comprende 4 grandes grupos de leyendas¨

1.Leyendas etiológicas
(aclaran el origen de los elementos inherentes a la naturaleza, como los ríos, lagos y montañas) y escatológicas (acerca de las creencias y doctrinas referentes a la vida de ultratumba)

2..Leyendas históricas y leyendas histórico culturales.

3.Seres y fuerzas sobrenaturales. Leyendas míticas

4. Leyendas religiosas.

Algunas leyendas pueden ser clasificadas en más de un grupo, ya que por su temática abordan más de un tema.

Video de la leyenda el ahorcado

Videos de leyendas

Videos de leyendas

Imágenes de leyendas

Ejemplos de leyendas

La Carreta Sin Bueyes



Vivía en un caserío del antiguo San José, pueblo de carretas, gente sencilla y creyencera; una bruja quien estaba enamorada del más gallardo de los muchachos del pueblo.

El muchacho por su gran apego a su fe cristiana no quería tener nada con ella pero la bruja valiéndose de artificios, lo logró conquistar y así vivir con él mucho tiempo, conviertiéndolo en un ser similar a ella.

Como se puede notar nadie estaba de acuerdo con esta unión, mucho menos el cura del pueblo el cual en sus prédicas denunciaba el hecho, al pasar de los años aquel muchacho, ya mayor, tuvo una enfermedad incurable y pidió a la bruja que si se moría, le dieran los santos oficios en el templo del lugar.

Al solicitarle al sacerdote la última petición de su amado la bruja recibió la negativa debido al pecado arrastrado en su vida.

La bruja dijo por las buenas o por las malas y al morir su hombre, "enyugó" los bueyes a la carreta y puso la caja con el cuerpo muerto, cogió su escoba, su machete y se encaminó al templo.

Los bueyes iban con gran rapidez pero al llegar a la puerta, el sacerdote les dijo "en el nombre de Dios paren", los animales hicieron caso, más no la bruja la cual blasfemaba contra lo sagrado.

El sacerdote perdonó a los bueyes por haber hecho caso y la bruja, la carreta y el muerto todavía vagan por el mundo, y algunas noches se oyen las ruedas de la carreta pasando por las calles de los pueblos arrastrada por la mano peluda del mismito diablo.


Los Duendes



No hay una sola persona que no haya escuchado hablar sobre los duendes. De esas pequeñas criaturas con las que las madres amedrentan a los niños: "Te van a llevar los duendes".

Cuando era pequeño me daba miedo de encontrarme con ellos. Los duendes son unos pequeños hombres en miniatura que miden como medio metro de altura, usan boina grande y visten lujosamente, con trajes de colores. La mayor parte del tiempo andan juntos. Andan por los potreros, cafetales y caminos solitarios, no les importa si es noche o de día con tal de andar vagabundos.

Al visitar una casa se hacen invisibles, molestan demasiado, echando cochinadas en las comidas, tiran lo que se encuentre en sus manos. Pero lo que más persiguen es a los niños de corta edad, los engañan con confites y juguetes bonitos; así se los llevan de sus casas para perderlos. Si el niño no quiere irse, se lo llevan a la fuerza; aunque llore o grite. Una vez un señor, quién me merece todo respeto, contó que una noche, cuando él iba a caballo con otro amigo vio saltar un chiquito a la orilla del camino. Al ver esa figurilla en ese camino tan solitario y en horas tan inoportunas ambos se extrañaron; bajaron el ritmo de los caballos para preguntarle hacia donde se dirigía. Voy a hacer un mandadillo dijo el pequeñín. Pero a pesar de que apresuraban el paso, el pequeñín los seguía a cierta distancia, con una habilidad increible. Aquel espectáculo los puso como piel de gallina, y no querían mirar hacia atrás; y cuando quisieron mirar, había desaparecido.

Algo muy parecido a esta historia anterior le sucedió al hijo de un amigo. Sus padres lo buscaron por todos lados, se había perdido hacía dos días, quién estaba en un potrero lejano del pueblo.

Cuando se le pregunto como había llegado allí, dijo que unos hombrecitos muy pequeños se lo habían llevado dándole confites y juguetes; pero cuando estaban lejos del pueblo, pellizcaban y molestaban y mientras lloraba, aquella jerga de chiquillos reían y bailaban.

Este suceso se comentó mucho en aquel pueblo y es digno de estudiarse por lo misterioso del caso.

Dicen las gentes que para ahuyentar los duendes de una casa, aconsejan poner un baile bien encandilado con música bien sonada.


La Llorona



De los campos a las ciudades emigran muchas jovencitas en busca de su sueño, de estudios y de tener mejores trajes y dinero para ayudar a sus familias.

Esta como muchas llegó a la ciudad y se empleo en casa de ricos, enamorándose de su hijo el cual cruelmente la dejó embarazada y luego la despidió de su trabajo.

No habiendo más que hacer, se devolvió a su casa escondiendo su hijo bajo su delantal, lo cual no logró por mucho tiempo, su familia, apegada al cristianismo, comenzó a decirle su error a todas horas, creándole gran angustia.

Una noche bajo un gran aguacero corrió hacia el río y pariéndolo lo lanzó a la corriente, al ver lo que había hecho se lanzó detrás del niño gritando y llorando.

Todavía en las noches de luna después de una creciente se oye el llanto de esta mujer, y se puede verle tras el rayo de luna en el agua del río, tratando de alcanzar a su hijo.

Dicen que el señor en su gran misericordia tendrá compasión de ella y que algún día lo alcanzará, volverá a la vida y será un gran hombre revolucionario de la sociedad.


La Negrita




Por los años de 1635, la Puebla de los Pardos era un barrio segregado de la ciudad de Cartago, compuesto exclusivamente de mestizos. Era costumbre en casi toda la América española segregar a los mestizos de los blancos, obligandolos a vivir separados, hasta la fuerza de la Ley llegaba en ocasiones a prohibir el matrimonio entre ellos.

Por esta época existía allí un breñal a donde solían ir los pobres de Cartago a recoger leñna para cocinar, en las inmediaciones del breñal vivía una pobre y sencilla mujer que en la mañana del 2 de agosto se encaminó como de costumbre a recoger su carga de leña al breñal, y esta vez encontró sobre una piedra una imagen que representaba a la Santísima Virgen con el Niño en sus brazos, de un tamaño no mayor a una cuarta y tallada en piedra, la recogió y al llegar a su humilde casa la guardó en una cajita de madera.

Cuando ya se acercaba el mediodía, la mujer volvió al breñal por más leña y, llena de admiración, encontró la imagen sobre la misma piedra. La tomó creyendo que era otra imagen y se la llevó a su casa. Cuando abrió la caja para guardarla junto a la otra, llena de estupefacción notó que la otra imagen ya no estaba. Su estupefacción creció a tal punto y casi de espanto, cuando por tercera vez, al volver al breñal encontró la imagen sobre la misma piedra. Sin embargo, la tomó en sus manos y la llevó a su casa, a donde pudo constatar que se había escapado de la caja, y que encontró vacia. La buena y humilde mujer se alarmó muchísimo, corrió a la casa del cura del pueblo, se la entregó y le contó los extraños sucesos que había experimentado momentos antes. El cura, que según cuentan era don Alonso Sandoval, tomó la pequeña imagen y la depositó en un cofre con el fin de examinarla después detenidamente. Al día siguiente cuando el señor cura decidió examinar la imagen, se dió cuenta que ya no estaba en donde la había puesto, y cuando la pobre mujer que anteriormente había descubierto la imagen, decidió volver al breñal a recoger la leña matinal, con asombro encontró la imagen sobre la misma piedra en que tantas veces la había hallado. Corrió la mujer donde el señor cura, este con otras personas del lugar llegaron al breñal y en solemne procesión la llevaron hacia la iglesia parroquial depositándola en el Sagrario. Al día siguiente cuando quisieron examinarla, ya no estaba en el lugar, corrieron todos a la ya conocida piedra en el breñal y allí estaba, sobre la misma piedra. Era la quinta vez que en esta forma se manifestaba la Santísima Virgen, comprendiendo asi que quería tener su casa allí mismo, se dieron inmediatamente a la ardua tarea de levantarle una ermita, mientras podían construirle un templo digno de ella la celestial Señora, "La Virgen de los Angeles".

Leyendas


Una leyenda es un relato de hechos humanos que se transmite de generación en generación y que se percibe tanto por el emisor como por el receptor, como parte de la historia. La leyenda posee cualidades que le dan cierta credibilidad, pero al ser transmitidas de boca en boca, se va modificando y mezclando con historias fantásticas. Parte de una leyenda es que es contada con la intención de hacer creer que es un acontecimiento verdadero, pero, en realidad, una leyenda se compone de hechos tradicionales y no históricos.
El término “leyenda” proviene del latín legenda, que significa “lo que debe ser oído”. Originalmente, era una narración escrita que era leída en público en las celebraciones de las festividades de los santos. Desde el siglo XIX, la leyenda es considerada como un sinónimo de la llamada tradición popular. Como parte del género literario, la leyenda se considera como una narración de carácter ficticio con origen oral.